Guillermo Farré celebró el triunfo que obtuvo Belgrano, ante Platense por la Copa de la Liga, y consideró que ese resultado “revalida los puntos” que su equipo venía obteniendo en el torneo, en el que había sumado tres empates en fila.

El gran segundo tiempo que tuvo el equipo en el estadio de barrio Alberdi, en el que anotó los 3 goles del claro triunfo, fue para Farré producto de los cambios que realizó en la posición de algunos futbolistas.

"Interpreté que podíamos lastimar por dentro y hacer transiciones rápidas con Ulises (Sánchez) y (Matías) Marín. No pudimos hacerlo, y en el segundo tiempo vi que podíamos hacer un juego más efectivo por las bandas", explicó.

“Soy el primer culpable de todo, porque no gano nada excusándome. Si tengo que cambiar la estructura de juego, hay que hacerlo para sacar adelante el partido", admitió el técnico, que pudo cambiar a tiempo en esta ocasión.

En ese sentido, analizó que en el primer tiempo su equipo "no tuvo precisión ni intensidad. No pudimos ser protagonistas con la pelota. A lo largo de mi proceso, de locales hemos tenido una energía superior al rival. Hoy eso de ser ambiciosos e ir a buscar el partido se vio en el segundo tiempo", puntualizó.